la vida monástica contemplada a dia de hoy.

A continuación unas palabras entresacadas de una entrevista realizada a Francisco Rafael, monje cisterciense de Viaceli:

La síntesis de la vida monástica, de clausura o contemplativa, se expresa en la idea y en el hecho de que "los cistercienses, revestidos por dentro y por fuera del aprecio religioso de la soledad, abandonaron sus tiendas en el desierto, regaron las tierras áridas y sedientas y el desierto floreció y dio frutos, no solo de virtudes y comportamientos cristianos, sino de sabidurías, escritores y tratadistas de ascética y mística. Ni fueron ni son simples autores espirituales, sino comunicadores de la ciencia de Dios, con lógica integración en la enseñanza y ejemplo del sentir y vivir en fiel consonancia con el evangelio y en común unión de vida con su propia comunidad y con el resto de los cristianos y aspirantes a serlo algún día".
Hubo tiempos gloriosos en la historia, eclesiástica y no tanto, en los que monjes y monjas fueron los educadores de la fe del pueblo que, desde la contemplación- comunicación con Dios y vida consagrada, les era servida por ellos y ellas. La cultura, el cultivo del campo, el trabajo, el sentido integral de la vida y de la muerte, el respeto a la naturaleza- ecología, la vivencia religiosa, la interpretación de la vida y de la familia en armonía y solidaridad, la felicidad, el equilibrio entre lo humano y lo divino y la transcendencia, fueron asignaturas y disciplinas estudiadas, vividas y testimoniadas prevalentemente, y casi en exclusiva, en tantos lugares y estamentos, por monjes y monjas contemplativas. Unos y otras fueron "providencia divina", intérpretes e interlocutores- mediadores entre Dios y los hombres. ..